Significado del árbol de Navidad

El árbol de Navidad forma parte de una tradición mucho más reciente en comparación con el Nacimiento o Pesebre. La preparación del árbol de Navidad tiene un significado cristológico, ya que es figura de Cristo que es el eterno árbol de la Vida, aquellas luces que lo adornan nos recuerdan que Cristo es "la verdadera luz que nació en Belén" y de lo cual el mundo es testigo y lo reconoce. De la misma manera, los diferentes adornos de los cuales se reviste traducen simbólicamente, según un explícito texto del Apocalipsis (22,2), la riqueza de hojas y de frutos del árbol del Paraíso.

El árbol de  Navidad nace y se extiende en las familias del mundo a partir del siglo XIX.

La familia católica prepara junto al Pesebre el árbol de Navidad. Para muchos Padres de la Iglesia la Cruz de Cristo es llamada también árbol de la vida, porque ha concedido al hombre pecador volver a la vida, la vida eterna. Gregorio de Niza sostiene que  "el árbol es igual a la Sabiduría misma de Dios dada al hombre en forma de comida". Orígenes, habría escrito que "el árbol es signo de la sabiduría de Dios, pero también de las demás virtudes que crecen gracias a la lluvia benéfica de la Palabra de Dios".

Para nuestra familia es motivo de alegría y acontecimiento especialísimo preparar el Pesebre y el arbolito o árbol de Navidad en un lugar central de nuestra casa. Allí llegan nuestros hijos, sobrinos, nietos y toda la familia a adorar al Dios Niño. Las cartas de los niños, y los regalos recibidos son recuerdos inolvidables.

Todo es signo de la presencia de Dios en nuestras vidas; de nuestra fe, de nuestros valores y de nuestra unión familiar. Recibir la Eucaristía en Nochebuena es una verdadera bendición...